La Milagrosa y el derbi

Hoy se celebra el Cabildo de Toma de Horas de la Semana Santa 2019. Creo que la Hermandad de La Milagrosa haría bien en notificar unos nuevos horarios de su estación de penitencia, porque su trascurrir por el hospital de San Juan de Dios coincide en hora con la llegada de los aficionados más radicales al derbi, que se disputa en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. Como es obvio, estos dos eventos no pueden coincidir, pero a día de hoy no hay oficialidad de cambio horario en ninguno de ellos.

Por si alguien no sigue de cerca la actualidad deportiva, le pongo en antecedentes de como ha sido la cronología de los hechos. Este año los dos equipos sevillanos participaban en competiciones europeas. De no haber sido eliminados, habrían disputado partido el Jueves de Pasión y el Jueves Santo. La legislación deportiva dice que un mismo equipo no puede jugar dos partidos en menos de 72 horas, por lo que de haber llegado alguno de los dos a Cuartos de Final de la Europa League, el derbi tendría que haberse jugado el Domingo de Ramos. En su momento ya hubo polémica y quejas por eso también, cuando parecía muy factible que este hecho se produjera. Eliminados de la competición ambos equipos, el partido pasa al Sábado de Pasión a las 20.45. Por tanto, el conflicto es solo con una hermandad, La Milagrosa, y no con el dispositivo de toda una jornada como es el Domingo de Ramos.

Se están marcando a muchos culpables, pero en mi opinión, los dos máximos responsables son José Castro y Ángel Haro, presidentes del Sevilla y del Betis, respectivamente. Justamente este año el calendario de la la liga española era asimétrico, buscando que los grandes partidos no coincidieran con las fiestas locales. Los dos presidentes callaron en julio cuando, el fin de semana que empieza la semana más importante de Sevilla, salió el partido de más tensión del año. Y luego vuelven a faltar a su deber hace escasas semanas, porque aunque es verdad que ellos no deciden el horario, el cual es impuesto por la plataforma televisiva que tiene los derechos, podrían haber alzado la voz - e incluso metido presión - para que se jugase el sábado a las 13 horas, horario que habría dejado satisfecho a todo el mundo. Ninguno de los dos ha movido un varal, nunca mejor dicho, en este asunto. 

Dicho lo cual, y una vez que parece imposible que el partido liguero se cambie de hora, creo que también hay que reconocer que el sevillano peca siempre de ombliguismo - el cofrade especialmente - y en este tema no ha sido excepción. Pensamos que todo en la ciudad debe girar alrededor nuestra y eso ni es así ni debe serlo. Pedimos que todas las instituciones públicas se pongan a nuestra disposición y que no tengan en cuenta otros eventos de la ciudad. El derbi mueve a muchas más personas que La Milagrosa. En realidad un partido así mueve más que cualquier hermandad en un punto concreto. Como dato curioso, la entrada de la Macarena es la imagen que más gente concentra en un espacio preciso. Desde que sale a la Resolana hasta que entra en la basílica se calcula que pueden ser unas 25.000/30.000 personas las que estén allí. En el Sánchez Pizjuán en cualquier partido hay más personas, máxime en un día como el derbi. Como todo el mundo puede comprender, la comparación  con las personas que La Milagrosa atrae a San Juan de Dios no se sostiene. No creo que sea un problema adelantar su llegada al hospital de San Juan de Dios, es más, creo que ir a un hospital a las seis o siete de la tarde es más apropiado que hacerlo a las 21 horas. Incluso profundizando más en el asunto, La Milagrosa ha pedido ir a la catedral el Sábado de Pasión, en tal caso saldrían a una hora temprana; si no es inconveniente en las maduras, no debe ser un ataque a su esencia en las duras.