viernes, 4 de julio de 2014

Hablemos de diezmos

Quiere el señor Asenjo que hablemos de diezmos. Pues bien, entremos en su juego y hagámoslo aunque si tuviera un poquito de vergüenza (cosa que no dudo, faltaría más) se habría puesto un poco "colorao" con la bochornosa rueda de prensa que ha dado esta mañana. Hablemos de diezmos que es la palabra exacta que él ha usado, aunque en realidad quería hablar de dinero pero esa palabra ya no queda tan bien ni es tan eclesiástica. Antes que nada y para que nadie se lleve a engaño voy a decir una cosa, no soy imparcial en este debate, lo confieso abiertamente, prefiero que el dinero de los hermanos lo gestionen íntegramente las hermandades a que lo hagan los responsables de la quiebra de Cajasur, los señores Asenjo y Gómez Sierra. ¿También hablaba el señor Asenjo de diezmos cuando 13 consejeros de Cajasur fueron multados y se tuvo que dar una ayuda pública de 392 millones de € debido a la quiebra en la que habían metido a la Caja?

Señor Asenjo, cuando usted habla de exigir el pago del 10% a las hermandades me sorprende que no se sonroje ni un poquito y exija, al menos, ese 10% de la Iglesia a Cáritas, ya que actualmente usted "tiene mano" en la Conferencia Episcopal Española y que la aportación de su institución a Cáritas no llega al 2%, le pido que haga una rueda de prensa en Madrid, en los mismos términos que hoy ha hecho en Sevilla pero que en vez del diezmo de hermandades a Iglesia el tema principal sea el diezmo de la Iglesia a Cáritas. No habría mejor ejemplo de compromiso, coherencia y demostrar que es un buen cristiano.

Queda feo, muy feo, un miembro de la curia hablando más de dinero que de caridad, de ayuda al prójimo o de hermanamiento. Queda feo, muy feo, que un miembro de la curia le guste hablar más de dinero, perdón, diezmos, que de fraternidad, misericordia o ayuda a los más necesitados, pero lo que queda horroroso, es que el pastor de la Archidiócesis chantajee a las hermandades con boicotear actos o escribir artículos inquisitoriales en en los boletines de la hermandad. ¡Por dios!, padre, que a veces dan ganas de decirle "Padrino", cuide un un poco las formas cuando hable en público e intente respetar a esas hermandades que tanto hacen por la Iglesia.

Una minoría de hermandades aportan dinero al Fondo Diocesano, pero todas, absolutamente todas, hacen una labor impagable de caridad a quien más lo necesita y también son grandes creadoras de puestos de trabajo, porque estaremos de acuerdo que mejor que la caridad es el dar trabajo a las personas, y mucho más en esta época donde, por desgracia, un buen número de familias están sufriendo el azote del paro. No me haga recordarle que el dinero de las hermandades va para imagineros, orfebres, floristas, músicos, cereros, sastres, carpinteros.... y por supuesto también va a los supermercado sociales, centros de estimulación precoz, pago de becas, pago de facturas de luz y agua..... no me haga recordarle que ninguna de estas personas ni hermandades han tenido nunca que recibir 392 millones de dinero público por su mala gestión económica.