domingo, 12 de enero de 2020

La culpa es de unos señores rancios de Sevilla

Durante las semanas navideñas hemos conocido que por fin los abonados de la carrera oficial van a tener que pagar el IVA. Si lo miramos con una óptica neutral, no cabe duda que esta medida llega tarde y  es evidente que las personas que quieran disfrutar ese privilegio tienen que colaborar con el resto de la sociedad, como hace cualquier ciudadano. Porque aunque da hasta grima bajar la argumentación hasta lo más básico, hay que aclarar que tener un silla en la carrera oficial no es una necesidad básica de las personas, aunque algunos en su "postureotitis terminal" no concebirían su Semana Santa sin ella. Se puede vivir sin tener silla, créanme.

En su línea habitual de difamación y desinformación, la prensa morada y casposa organizó una cacería contra un "señor de Murcia". Articulistas, redactores jefes, noticias tendenciosas y manipuladas... toda la artillería para ir contra la Agrupación de Cofradías de Murcia, a la cual responsabilizaban del hecho. Hasta el punto que éstos sacaron un comunicado, donde aclaraban que nada tenían que ver y se guardaban el derecho de ir a los tribunales por las calumnias recibidas. Esta prensa, autoproclamada profesional, pero que de eso tienen poco, es la que más ha ayudado a calentar el asunto, buscando - una vez más - su tajada política. Una de las mentiras más gordas que intentaban "colar" es que era una medida que repercutiría en nuestras hermandades, cuando eso es falso. El IVA lo pagan única y exclusivamente la persona que por voluntad propia decide tener un privilegio. Punto. Ni un céntimo es pagado ni por hermandades ni por el Consejo. Tanto esa prensa como parte del mundo cofrade están acostumbrados a usar a las corporaciones para sus batallas personales, ésto sólo es un ejemplo más. 

Lo recaudado por el impuesto del IVA se divide al 50 por ciento entre Estado y comunidad autónoma. Con él, por ejemplo, se pagan los salarios de los policías que velan por la seguridad en la Semana Santa o los sanitarios que prestan servicios extraordinarios durante la semana. También sirve para las subvenciones que reciben algunos museos cofrades o las ayudas para restauraciones patrimoniales - incluido restauraciones de templos - que reciben las hermandades. Por poner sólo algunos ejemplos básicos de como las hermandades no sólo es que no pierdan ni un céntimo con esta media, sino que reciben dividendos directa e indirectamente. 

En torno al mundo cofrade hay muchas ilegalidades que todos sabemos, pero que cuando alguien las dice, los demás silban y miran a las copas de los árboles. Es mejor hacerse el sueco que tener que explicar, con la ley en la mano, como es la gestión de algunos asuntos, especialmente en la carrera oficial. Lo del IVA era uno de esos asuntos, suerte han tenido que no apliquen un carácter retroactivo. Quizás en un futuro cercano empiecen a saltar otros asuntos que están ahí, que todos saben, pero nadie ataja. Quizás el aplicar por completo la legalidad en la carrera oficial sea el camino para solucionar tantos y tantos problemas que nos origina a todos los cofrades. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario